ABRIL
4. 1870. Martí es asignado a la Primera Brigada de Blancos con el número 113 en las Canteras de San Lázaro en la Habana. La cadena que le sujetaba su pierna al tobillo, le produjo una úlcera durante toda su vida.
6. 1878. Renuncia como catedrático de la Universidad de Guatemala por diferencias con el presidente Justo Rufino Barrios.
11. 1895. En la noche avanzada, José Martí, México Gómez, Francisco Borrero, Ángel de la Guardia, César Salas y Marcos del Rosario, desembarcan en Playitas, Oriente, Cuba.
14. 1868. Publica su poema “A Micaela” en el periódico “El Álbum” de Guanabacoa.
16. 1887. Martí es nombrado cónsul de Uruguay en Nueva York.
17. 1892. Son aprobadas las bases del Partido Revolucionario Cubano en el “Hardman” en Nueva York.- Martí es electo delegado.
26. 1879. Habla en banquete ofrecido a Adolfo Márquez Sterling en el “Louvre” en
la Habana.
27. 1879. Discurso en el Liceo Artístico y Literario de Guanabacoa en homenaje al
violinista Rafael Díaz Albertini. El General Blanco, Capitán General de la Isla, que estaba presente, se sintió insultado por las palabras de Martí e indignado, comentó:
“Quiero no recordar lo que he oído y no concebí nunca se dijera delante de mí, representante del gobierno español. Voy a pensar que Martí es un loco, pero un loco peligroso”.
Abril 11 de 1895. Desembarco y Tres cartas de Martí.
Tal vez sea esta una de las fechas más importantes en la vida de Martí, cuando acompañado de Gómez y un grupo de patriotas, desembarcaba en su amada patria para hacer realidad la gran ambición de toda su vida. No mucho tiempo duraría su presencia corpórea en su Cuba. El día 19 de Mayo, caería en combate entregando su vida como ejemplo máximo de sacrificio humano, como lo pronosticara en dos de sus famosas cartas y en un artículo de su “Revista Venezolana”. La primera, dirigida a su madre: “Mi porvenir es como la luz del carbón blanco, que se quema él para iluminar alrededor…” “…El derecho de verter la luz no se adquiere sino consumiéndose en el fuego. ” Y su segunda carta del día 25 de marzo de 1895 dirigida a su amigo Federico Henríquez y Carvajal afirma: “…Pero mi único deseo sería pegarme allí, al último tronco, al último peleador: morir callado. Para mí ya es hora”.
En Venezuela, en julio de 1881, Martí escribe un artículo en su “Revista Venezolana” en memoria del gran pensador Cecilio Acosta que se puede interpretar como una anticipada descripción de su propia vida y muerte, porque también “él se dio entero” a su patria y a los hombres para ser “devorado”:
“…Quien se da a los hombres es devorado por ellos, y él se dio entero; pero es ley maravillosa de la naturaleza que sólo esté completo el que se da; y no se empieza a poseer la vida hasta que no vaciamos sin reparo y sin tasa en bien de los demás la nuestra.”